Sin avances en el caso de la colonia Americana
Luis Fernando Nájera/ Los Mochis
Han pasado ya casi 20 días de que industriales dañaron la colonia americana, considerada como los orígenes de Los Mochis, y todavía no dan la cara. Peor aún, estos dejaron “colgado” alcalde, Policarpo Infante Fierro de negociaciones que éste comenzó con el fin de acordar una salida al hecho que generó una gran inconformidad social y la movilización de grupos que reclaman como patrimonio de la ciudad el actual caserío en ruinas.
La situación no se antoja fácil de resolver, pues aunque el alcalde asegura que tiene el apoyo de los regidores, lo cierto es que no da un paso para adelante. Y así lo reconoció durante la entrega de una techumbre a la escuela primaria José María Morelos. Durante un lapso en el evento, Infante Fierro reconoció que no tiene contacto directo con los empresarios, pero al igual que días atrás cuando insistía en que lo lograría, dijo que lo tendría en cualquier momento. Pero ese momento no llega, y peor aún, se atrasa.
El alcalde quedó atrapado en su propia red que tejió buscando una solución de autoridad al problema.
Mientras esto ocurre, grupos de artistas y de creadores se han sumado a la defensa de las ruinas de la casa americana. Y poco a poco, ese ejemplo cunde en las escuelas primarias y secundarias. Poco a poco, grupos de colegiales acuden a ver lo que quedó de aquellas casas que dieron origen a la ciudad.
La Crónica de Sinaloa a través de Juan S. Avilés pidió que detenga la demolición criminal de las casas en la Colonia Americana porque forman parte del patrimonio cultural y artístico de una población que las ha hecho suyas, no de ahora sino que forman parte de la riqueza arquitectónica de Los Mochis desde su creación. Demanda salvar ese predio y reconstruir las casas que fueron dañadas, y exige al gobierno municipal que encabeza Policarpo Infante Fierro expropiar en beneficio de la comunidad y otorgarle a la Colonia Americana el valor que merece y demandar a los empresarios no dañar el patrimonio artístico y cultural de los pueblos ante el poder y el dinero dejando de lado las tradiciones propias del lugar.
No obstante, el gobierno municipal parece adormilado y no actúa.
22 de enero 2007
FUENTE: RÍO DOCE
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