UN TRIENIO NUBLADO

Portalito
Benditas lluvias

José Refugio Haro

De nuevo una impertinente, incómoda, lluvia, viene en este trienio a deslavar cortezas, frágiles epitelios, de problemas que estuvieron a punto de permanecer ocultos, diferidos para cuando el responsable haya huido lejos de reclamos y juicios.

¡Qué sabias han resultado estas lluvias destapatubos mal colocados o parapetados para dar tiempo a la escapada! Antes otras iguales sacaron a flote los cadáveres tubulares y pusieron en evidencia inversiones y gastos de responsabilidad y precisión confusas, porque “la gran obra de entubamiento del dren Mochis” (Tercer informe de Gobierno) ha sido desde el principio capeada con dobles discursos y enmascaramiento de datos sobre el financiamiento y costos.
Con las lluvias que como feroces fiscales mandó antes el “Henrriete” salió la duda de quién construía y qué responsabilidades tenía, porque ante los daños del fenómeno meterorológico nadie quería responder, y hoy mismo se esboza la duda de quién pagará los casi 3 millones de los daños que, en una asignación ordenada de obra pública, debería ser la constructora.

En el pasado informe mucho se festinó el logro de las obras de drenaje, quizá queriendo anticipar ésa del dren Mochis, en la que sobresale no sólo una intencionalidad probablemente buena de querer resolver un problema de drenaje y alcantarillado, sino algo más que tiene que ver con la venta de terrenos.

Ya sucedió lo de siempre: que los entrevistados califiquen de “informe realista” (què palabrita ésta última tan duradera y útil) el ramillete de autoelogios del sábado en el auditorio Figlos, confiados los políticos todavía en que no llega la hora de expresión libre de los gobernados acerca de la función de sus gobernantes.

Como declaró la regidora María de la Luz Ramírez, del PAN, en ningún momento se tocó en aquel discurso el problema de la obra inconclusa (y desconchiflada por las lluvias de ahora y las anteriores) del entubamiento del dren Mochis, ni el de la emblemática colonia Americana, que fue grave e impunemente agredida durante este gobierno que termina en unos días más, a pesar de que hace poco desde el Jurídico del Ayuntamiento se había anunciado festivamente la conclusión en breve del acto de “donación” de un espacio “representativo” por parte de la empresa azucarera, a cambio --se infiere- de la modificación del uso del suelo sacada en el Cabildo aunque sin publicación en el Órgano Oficial del Estado de Sinaloa.

Tampoco aludió el alcalde Policarpo Infante Fierro la hediondez infame que inunda a todo el sector que comprenden las colonias San Francisco, Jaramillo, Del Real e Infonavit Arboledas por motivo del dren que ahí se encuentra.
Esas lluvias “halconeras” del domingo y lunes pasados no han dicho todavía todo su mensaje. Falta saber aún su contenido en cuanto a baches en las calles recubiertas con emulsión asfáltica como la que tienen la Madero y Heriberto Valdez al poniente, que con cualquier mojadita se desintegran, y ya vimos la poca importancia que se le dio al problema del bacheo a lo largo de este trienio.

Por ello, igual que los agricultores, tenemos que decir: benditas lluvias, que consiguen derribar escenarios de papel y desvirtuar historias fantásticas

FUENTE: NOROESTE