El Frente de Defensa del Patrimonio Histórico, Artístico, Cultural y Ecológico ya lleva ahí, en protesta pacífica, 73 días, aferrado a la lucha con el único afán de que se respete en conjunto las fincas y el gran jardín de la malograda Colonia Americana.
Han juntado más de 25 mil firmas espontáneas de la ciudadanía y dicen que, para lograrlo, seguirán hasta donde puedan.
Ayer domingo, como parte de las jornadas artísticas que celebran cada fin de semana desde el pasado 31 de diciembre de 2006, los artistas convocaron a las familias a delimitar la zona con un gran listón que formaron con la mantas que desde esa ocasión colocaron en la cerca, con consignas en defensa de la Colonia Americana; y con la realización de murales con manos de niños que apoyan el rescate de la historia.
En las mantas que rompieron para hacer el gran listón, se pedía expropiación y rescate inmediato. Así se pidió en sesión solemne de Cabildo el 5 de enero de 2007 en Villa de Ahome, avalado con las primeras cinco mil firmas recabadas esa semana.
El Cabildo convocó a nueva sesión extraordinaria para el asunto y se acordó entablar una negociación que aún no termina, pero que está en el punto de que se done al Ayuntamiento de Ahome, dos fincas, un terreno anexo y las escrituras de la Casa del Centenario, a cambio de acabar con el resto.
Desde sus inicios, el movimiento convocó a todas las personalidades de la vida cultural, la historia, la educación, cronistas, colegios de profesionistas, IP, autoridades de todos los niveles gubernamentales y universidades naciendo el Frente Ciudadano de Defensa del Patrimonio Histórico, Artístico, Cultural y Ecológico, que nombró al artista plástico Ricardo Corral como representante.
Es este artista quien informa a detalle el devenir de "la colonia", en tanto se prepara con manta y pintura, para pedir a los niños que les echen una mano a la historia pintando su huella en los lienzos en apoyo, y así engrandecer la exposición colectiva Los Mochis: herida abierta, que mantienen colgada en la cerca, flanqueada por un gran mural que declara expropiada esa finca para la creación de un complejo artístico, turístico y cultural.
Gilberto Zayas, escritor-editor y miembro del frente, confirma que todas las opiniones que han tenido de especialistas del Instituto Nacional de Antropología, Colegios de Arquitectos y Facultades de Arquitectura son en el sentido de que el daño es reparable, muy costoso quizá, pero valioso y posible; de ahí las ganas de estar en acción y vigilantes de que se cumpla lo ya decretado y acordado.
FUENTE: EL DEBATE
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