sábado, julio 07, 2007

LAS VENTA DEL SIGLO


Regidores del PRD rechazaron apoyar la propuesta de empresarios

Foto: Noroeste/Luis Vázquez
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Crónica de una venta anunciada...

Finalmente la venta de la Colonia Americana fue aprobada y Los Mochis se quedará solo con una "muestra" de su historia.

José Alfredo Zepeda

La programación fue hecha desde hace días, los regidores fueron informados acerca de la sesión de Cabildo 02 con fecha 06 de los corrientes.

16 de los 18 ediles acudieron al llamado, raro en ellos, ya que durante todos los días sus lugares de trabajo están vacíos y poco acuden al llamado de la ciudadanía, según lo revelaron a esta casa editora empleados de la misma Comuna.

Ya en la sesión, estuvieron presentes los "protagonistas" y sus respectivos "porristas".
Frente al Alcalde Policarpo Infante Fierro estaban además de los regidores, un sinnúmero de pancartas en las que se le exigían distintos puntos, entre estos la devolución de un edificio de la aduana en Topolobampo, el cual al parecer le fue otorgado al empresario Leonardo Félix, además del caso de la Colonia Americana.

Un total de 16 cartulinas a favor de Polo Infante, en las cuales había mensajes como "si a la cultura y si al desarrollo", otros haciendo alusión a que la ciudad tenía que hacer un sacrificio, refiriéndose a la demolición de la Colonia Americana, entre otros.

Aunque no hubo quien dijera de parte de quien iba, se supo extraoficialmente que en su mayoría, los "defensores" del Alcalde y su cuerpo de regidores eran vecinos de la colonia Texas, familiares de una funcionaria del sistema DIF, quienes al parecer fueron contratados como "paleros".

Mientras la sesión se llevaba a cabo y los puntos se desahogaban uno a uno, el ambiente se tensaba.
Polo escuchaba uno a uno los temas y al llegar al caso de la Colonia Americana, el pintor local Ricardo Corral con una pancarta que decía: "Señores regidores, en cuánto vendieron la voluntad ciudadana, 50, 100, 200...~?, se paseaba una y otra vez alrededor del lugar, hasta llegar a ponerse detrás del mismo Alcalde.

El primer edil perdió la cabeza, se encorajinó y en forma repentina se volteó para con el manifestante a la vez que le reclamaba entre dientes que se trataba de una falta de respecto.

Su tío político, chofer y guardaespaldas Miguel Ángel Rivera, mejor conocido como "el Borrego" rápidamente se dirigió al pintor y lo desalojó de donde se paseaba.

Así pasó toda la sesión, curioso era que el mismo "Borrego" no quitaba a los manifestantes que apoyaban la decisión del Alcalde y sus regidores.

Los gritos de "vendidos, vendidos" no se hicieron esperar, mientras las cosas subían de tono.

El Alcalde miraba con desprecio a los manifestantes defensores de la Colonia Americana, al igual que su chofer, el odio apareció en sus miradas, pero poco podían hacer, parecía que con la vista se los comerían.

Tarde se les hacía a los que tomaron la decisión de solo recibir la donación de una fracción de terreno y solo unas "muestras" de la Colonia Americana para retirarse y no escuchar más las críticas en su contra.
Poco más de dos horas tuvieron que soportar los regidores para pasar a la historia mochitense como aquellos que no supieron defender la esencia de la ciudad, como aquellos que según la ciudadanía no se merecían ser representantes de ellos, ni mucho menos gozar de un puesto político.

Yamil Hallal, regidor perredista fue el único que mostró una oposición férrea en el asunto, no así los panistas, quienes como Poncio Pilatos, se "lavaron las manos", mientras que como era de esperarse, los priistas apoyaron en todo al Alcalde, excusándose bajo el argumento que la construcción de una plaza comercial le traería a Los Mochis más fuentes de empleo, por lo que había que hacer un sacrificio.

Ya al final, todos se calentaron, Yamil Hallal se hizo de palabras con el regidor panista Salomón Sánchez Ruiz, como reclamando el por qué se "lavó las manos" en el caso de la Colonia Americana.
A juicio de muchos, los panistas no participaron según ellos en forma directa en esta decisión, aunque la omisión también es participe de la demolición de lo que queda de la Colonia Americana.

Como perros y gatos terminó todo, las regidoras Mary Sánchez Solís y Dolores Zamora Lugo se enfrentaron a grito abierto con una manifestante cuando las acusaron frente a frente que eran unas vendidas, exigían que les comprobaran, algo tal vez imposible.
La decisión fue tomada, la mayoría de la Colonia Americana será demolida, sólo quedará un terreno baldío y tres inmuebles y la casa del Centenario, misma que ya era propiedad del Ayuntamiento y por si fuera poco, se tiene contemplado remover a este sitio el monumento a la Madre.

Polo no salió por la puerta trasera porque no había, pero se fue aprovechando el desorden que había, en la sala de Cabildo quedaron solo los que alegaban entre sí y quienes defendían la historia de la ciudad, al igual que aquellos que pagados o no, estaban a favor del desarrollo y de la cultura, muy conscientes de que había que hacer un "sacrificio", uno que sabe cuánto costó, bueno, históricamente hablando...

FUENTE: NOROESTE

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