CULTURA Y MOCHIS NO SON COMPATIBLES

Portalito

Cultura ¿Qué es eso?

José Refugio Haro

Ya anunciaron que en breve le darán en la torre a lo que Polo dejó del primer hospital en la historia de Los Mochis, el Hospital de la SICAE, que funcionó en la calle Guerrero, entre Obregón y bulevar Rosendo G. Castro. Como se recuerda, cuando más se discutía sobre la necesidad de proteger ese edificio y las casas de la colonia Americana, las autoridades municipales finalmente hicieron lo mismo que con éstas últimas, dejar hacer, dejar pasar, y que las máquinas y trogloditas del ingenio entraran en una noche de diciembre del 2007 a realizar su trabajo de media demolición del referido edificio, tal como lo habían hecho un año antes con las casas de la colonia Americana, en beneficio de quienes pagan el servicio. Eso fue en las postrimerías de dicho gobierno, y enseguida ocurrió el mismo script, la indignación fingida, el apostamiento de agentes policiacos por unos días, para la foto de la prensa y para las cámaras de la tele, y después, nada, a esperar que pasaran los días y el anuncio triunfal de que llega a Los Mochis una maravillosa y espectacular empresa (si es trasnacional, mejor) para el beneficio y felicidad de los mochitenses. Viene, pues, un nuevo y fastuoso hotel a instalarse ahí, y chin chin el que no aplauda. Con esta nueva aportación, ahora habrá en el mismo sector una gran agencia de automóviles orientales, una tortería de caché con ribetes de internacional (Burger King), una nevería por el estilo, una empresa de oportunidades para salir de pobre ("Caliente") que en realidad sólo hace ricos a los dueños de tan singular concesión del gobierno federal y aniquila la economía y paz familiares, y también al diputado fast track Mario Zamora Gastélum, casero del Caliente; otro hotel, una tienda departamental, sucursal 2, y lo que se acumule esta semana, porque ya están preparando un terreno en los patios del ingenio, que así ha sido acorralado y por algo sus trabajadores le vieron las orejas al lobo y ya se pusieron en huelga, porque lo que sigue, sin duda, es un albazo-cierre por quiebra de los propietarios, quienes en realidad se han cuajado con la ganga que les dio el gobierno al venderles la factoría y unos terrenos valiosísimos. Bien, pues lo que se ve es que a los prohombres mochitenses y a los que fortuitamente llegan a los gobiernos municipales les vale un soberano camote la ciudad, el municipio y sus habitantes. Y como los mochitenses raramente se expresan con fuerza en la defensa de sus derechos, pues se l a llevan fácil todos los mencionados para resolver su problema económico de por vida. No tiene la culpa el indio sino el que lo hace compadre, es decir, el que por indolencia permite que los aventureros de la política y los avorazados cazadores de oportunidades y demasías hagan polvo el concepto de espíritu de los pueblos, es decir su cultura. ¿Qué es eso? FUENTE: NOROESTE